El goteo de un grifo representa el despilfarro de 30 litros al día, es decir más de 10.950 litros al año.
Una fuga pequeña de un inodoro puede gastar hasta 200.000 litros de agua al año.
Revisa tus grifos y aparatos sanitarios, piensa en tus hábitos de consumo y decide los cambios tecnológicos necesarios.
Estamos acostumbrados a descongelar o limpiar los alimentos bajo el agua corriente. A veces es tan fácil como cerrar el grifo y pensar en otra forma de hacer las cosas para empezar a ahorrar agua.
Las máquinas limpiadoras te ayudarán a ahorrar agua en las tareas de limpieza de tu establecimiento.
Seguro que el servicio es uno de los lugares más visitados en tu establecimiento, por eso allí el ahorro de agua es fundamental. El consumo medio de agua en un restaurante es de 19,8 L/comensal, consumiendo unos 1.578,93 metros cúbicos de agua al año.
El lavavajillas y las máquinas de hacer hielo son los equipos que más agua consumen. Actualiza tu cocina con aparatos más eco-eficientes y utiliza el programa Eco o de bajo consumo.
El vidrio tiene muchas vidas. Prioriza la reutilización del vidrio, es más ecológico y su impacto ambiental es inferior al producido por los envases de un solo uso.
El papel que se recoge y se recicla al año en España supone un ahorro de espacio en vertedero equivalente a 44 grandes estadios de fútbol llenos hasta arriba de papel y cartón. Recogemos para reciclar el 71% del papel que utilizamos.
Por cada botella de vidrio que se recicla se ahorra la energía necesaria para tener un televisor encendido durante 3 horas.
Cocinar con un recipiente utilizando su tapa ahorra hasta un 25% de energía. Si, además, escoges el tamaño adecuado de sartén o de olla se puede llegar a reducir el consumo un 90%. Un simple gesto que marca la diferencia.
¿Cuántas veces nos dejamos luces encendidas que no iluminan a nadie? Si nos tomamos la molestia de apagarlas, ahorraremos en la factura y disminuiremos la huella de CO2.
Ten en cuenta las medidas del Real Decreto-ley 14/2022, de 1 de agosto de medidas de ahorro, eficiencia energética y de reducción de la dependencia energética del gas natural y apaga el alumbrado exterior.
El mantenimiento de los sistemas que consumen energía garantiza el correcto funcionamiento de las luminarias, los aparatos eléctricos, los sistemas de aislamiento, los sistemas de climatización, etc., evitando el consumo energético por fugas o por mala operatividad. El mal funcionamiento de tus neveras, unos radiadores sucios o unas juntas en mal estado pueden aumentar su consumo hasta un 30%.
No dejes a tus clientes helados. Reducir en un grado la temperatura en el termostato del aire acondicionado genera alrededor de un 8% más de consumo de energía eléctrica y un aumento de las emisiones de CO2.
La temperatura del aire en los recintos habitables acondicionados se estima entorno a los 27 °C, teniendo en cuenta las medidas de ahorro energético recogidas por el Real Decreto-ley 14/2022, de 1 de agosto de medidas de ahorro, eficiencia energética y de reducción de la dependencia energética del gas natural. Este umbral de temperatura puede ajustarse, en su caso, para cumplir con lo previsto en el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, reduciendo la temperatura a 25 °C.
Durante el lavado manual de 140 piezas de vajilla se consume una media de 106 litros de agua y 2,3 kWh, con el lavavajillas a carga completa solo 20 litros de agua y 1,2 kWh. Aprovecha hasta el último hueco. Lavar los platos a mano inadecuadamente, con agua caliente puede resultar hasta un 60% más caro que hacerlo con un lavavajillas moderno a plena carga.
La conducción eficiente es un modo de conducir el vehículo que tiene como objetivo lograr un bajo consumo de carburante a la vez que reducir la contaminación ambiental. Una conducción eficiente puede ayudar a reducir la huella de carbono de tu establecimiento.
El 50% de los viajes en coche en la ciudad son inferiores a 3 kilómetros lo que supone un tiempo de unos 10 min en bicicleta. Además de incentivar el uso de los servicios de bicicleta compartida que ya operan en muchas ciudades españolas, puedes implementar otras medidas como crear aparcamientos para bicis o un espacio donde guardar sillines y cascos. Quizás también puedas hacer promociones para clientes que vayan a tu establecimiento en bici: ¡el medio ambiente puede ser una diferenciación en positivo!
Las entregas a domicilio representan una prestación de gran valor para los clientes. Tener en cuenta todas las fases del servicio desde el producto de reparto, el empaquetado, el transporte, el uso y la eliminación de los residuos es imprescindible para ofrecer un servicio más sostenible.
El transporte es el principal sector emisor de gases de efecto invernadero en España. Es el momento de apostar por la movilidad eléctrica, mucho menos contaminante, que poco a poco va ganando espacio. Para ello es necesario apoyarla colocando puntos de recarga para su funcionamiento.
El desperdicio de alimentos, además de las cuestiones éticas, supone un impacto en el medio ambiente y una enorme pérdida de recursos como agua, superficie agrícola y energía, que se emplean para producir los alimentos que finalmente se tiran. Ten en cuenta que el desperdicio alimentario es la tercera fuente mundial de CO2 tras EEUU y China.
Los productos de usar y tirar generalmente tienen una vida útil muy corta y suelen estar fabricados con materiales como el plástico o el poliestireno cuyos procesos de transformación son intensivos en el consumo de energía y, por tanto, en la generación de emisiones de CO2. En la Unión Europea el 40% del plástico y el 50% del papel que se consume se destina a la fabricación de envases, se fabrican 2.025 millones de envases de comida y bebida para llevar, equivalentes a 20.000 toneladas de residuos. La mejor opción es el uso de productos reutilizables por su menor impacto en el clima. En el caso de materiales hechos a partir de papel, utiliza papel con certificación FSC y garantizarás que están hechos a partir de madera de bosques gestionados de manera sostenibles.
Utilizando proveedores que apliquen criterios de sostenibilidad. Ponlo en valor, los clientes lo valorarán muy positivamente.
Utilizando proveedores que apliquen criterios de sostenibilidad. Ponlo en valor, los clientes lo valorarán muy positivamente. Prioriza proveedores lo más cercanos posibles y con productos autóctonos.
Ellos también forman parte de tu impacto en el medio ambiente. ¿La buena noticia? Puedes incluir información o realizar talleres para que ellos también se unan contra el cambio climático. Te permitirá demostrarles que te preocupas por el medio ambiente y te ayudará a fidelizar clientes.